Esta receta se come muchísimo en la zona del sureste, el clásico tomate con bonito, pero lleva un toque especial crujiente que me gusta ponerle siempre a los salazones y que no es habitual en este plato. Probadlo y veréis como está muy rico...
Lo normal es hacerlo con un lomo de bonito, pero yo he comprado también en y el resultado también es muy bueno. Además, hará falta un tomate, un chorro de un buen aceite de oliva virgen extra y pistacho picado (suelo comprarlo a granel en el mercado porque me parece que está infinitamente más sabroso...).
La elaboración es sencilla:
- Pelar el tomate y partirlo en rodajas redondas.
- Partir el bonito o el atún en trozos de un dedo de grosor aproximadamente, y colocarlo sobre el tomate.
- Picar cuatro o cinco pistachos y espolvorear por encima de la mini ensalada que hemos preparado. Es el toque un poco crocanti que os comentaba y que le queda de lujo.
- Rociar con un buen aceite de oliva.
(Se le puede añadir un poquito de sal al gusto, mejor si es en escamas).
Es un aperitivo refrescante y muy sabroso. Os lo recomiendo.
Un saludo.